Un año más y un tiempo igualmente especial que todos los años anteriores. Da igual que se repita, se vive como nuevo, cada momento es único y cada momento es el mejor para sentir en el corazón el orgullo que tenemos por tener de patrona a la Virgen del Rosario.
Estamos felices. Estamos agradecidos a Dios por habernos dado a su Madre y queremos hacerle llegar nuestra oración, muchos actos nos van a ayudar. Todos los días celebramos la Eucaristía, le cantamos a la Virgen el himno y la paseamos por nuestras calles en procesión.
Son muchas las personas que estos días colaboran con la parroquia y con la hermandad para que todos los actos sean dignos de lo que se celebra.Muchas gracias.
Ha hecho unos días espléndidos, la Virgen se ha paseado con un sol radiante, su vestido se lucía como el de una reina , su corona brillaba como el oro y su pueblo le ha hecho los honores que como Madre se merece.
El domingo, la ofrenda de flores para la Madre y el martes en las eras los cohetes para alzar al cielo la mirada y verlos explotar en el cielo donde nuestra oración se une al estruendo.
El lunes en la celebración de la Eucaristía se entregaron las medallitas de la Virgen a los niños nacidos en el año 2012, como tiene costumbre de hacer todos los años el grupo de prebautismal de la parroquia.
Siempre agradecidos a la banda musical que adorna con su música el paso de la Virgen por las calles.
También agradecidos a todos los sacerdotes que nos han acompañado estos días y nos han ayudado a profundizar en el sentido de las fiestas. Gracias por vuestra presencia y acompañamiento.
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