Ha pasado el curso volando y de nuevo nos despedimos hasta el nuevo encuentro en octubre después de celebrar las fiestas de nuestra patrona.
Hay que dar gracias a Dios, y a la Virgen María en este mes de mayo especialmente, porque un año más hemos podido compartir la alegría de conocer un poco más a Jesús.
Le ofrecemos flores a la Virgen como acción de gracias. Y terminamos celebrándolo lléndonos a merendar a los pinares y disfrutando de una tarde en compañía los unos con los otros.